Los líquidos del coche que debes revisar con frecuencia
Comprobar con frecuencia los líquidos del coche permite garantizar su buen estado para lograr que todas las piezas funcionen bien. No contar con el nivel adecuado puede provocar una avería grave en tu vehículo. Conocer los diferentes líquidos y revisarlos con cierta periodicidad, cada tres meses, te ahorrará más de un disgusto.
Aceite
Es uno de los fluidos más conocidos e importantes. Gracias a él, el motor se mantiene correctamente lubricado y se evitan daños por la fricción de las piezas. Es importante sustituirlo según lo indicado por el fabricante y comprobar su nivel con frecuencia. La mancha de la varilla debe situarse entre sus dos muescas.
Líquido refrigerante
Este fluido circula por el motor para rebajar su temperatura. Gracias a él se evita el sobrecalentamiento. Se trata de una mezcla de anticongelante concentrado y agua destilada. Además, cuenta con un depósito propio, generalmente transparente, en el que se indica el nivel mínimo y el máximo mediante unas marcas. Con el coche en una zona llana, debe situarse entre ambas.
Agua para el limpiaparabrisas
Se trata de uno de los líquidos que suelen olvidarse en la revisión. Apenas se le da importancia, pero supone una gran ayuda para la conducción. Es importante rellenar con frecuencia el depósito con agua o un producto de limpieza específico. El depósito es translúcido, lo que permite ver el nivel del agua.
Líquido de frenos
Este circuito hidráulico cuenta con su propio fluido para ejercer presión entre las piezas y accionar los frenos. Su cambio suele realizarse cada dos años para mejorar el funcionamiento del sistema de frenado. El depósito cuenta con un tapón negro con letras amarillas que dispone de un indicador.
Vigilar los líquidos del coche es clave para circular con seguridad. En caso de que alguno no esté al nivel indicado puedes acudir a nuestro taller para que nos encarguemos de reponerlo y solucionar cualquier problema.
